El inconfundible riff de guitarra, el groove íntimo y la atmosfera de la armonía que Robin Schulz logró crear con su éxito,“Prayer in C“ junto a Lilly Wood, crearon un embrujo en los fans de la música EDM y puso el mundo a sus pies. A la fecha, la canción logró ubicarse en el número 1 de Itunes en más de 27 paises y Top 10 en otros 36. En su natal Alemania, la canción fue No. 1 en los charts de radio, ventas digitales, Streaming, Shazam, Amazon y Spotify, en donde batio todos los records posibles. Por si fuera poco, Robin Schulz es el primer artista aleman en conseguir el No. 1 dentro de los charts de Shazam. El éxito del DJ de 27 años quién ha venido trabajando por más de 12 años en la música electrónica no ha dejado que el mismo se le suba a la cabeza. Los fans continuan disfrutando su presencia detrás del booth de DJ, totalmente concentrado en la música y su rostro y su mirada se siguen ocultando detras de sus lentes de sol. Robin Schulz se hace rodear de una aura llena de misterio, lo cuál hace más fascinante aún vivir la experiencia de tenerlo cerca y hacer vibrar a los fans a través de su música.
Los beats electrónicos han sido parte de su vida desde que era un niño. Su papa fue un DJ muy activo durante la década de los 80’s, por lo que Robin expreso mucho entusiasmo por la música y se dejó influenciar totalmente por ella. A la edad de 15 años, Robin vivió la experiencia de asistir a un club por primera vez. Un DJ amigo de su papa lo puso en la lista de invitados y ahí fue donde todo comenzó. La música sonaba completamente diferente ahí dentro, fue cautivado por el baile, las rosas y la felicidad del público, pero lo que más le atrajo de todo fue ver al DJ en acción; quién parecía tener todo bajo su control, incluyendo a la audiencia. Robin comenzó entonces a ahorrar para comprar su primer equipo de tornamesas que al fin pudo comprar cuando cumplió 17 años. Schulz entonces comenzó a abrirse paso en la ciudad de Osnabruck, de donde es originario junto a promotores que además contrataban actos internacionales como Andhim y Pan-Pot. Su club favorito se llama Dr. Vogel el cual es manejado aún por algunos amigos suyos.
Robin nunca tuvo una ambición obsesiva por convertirse en DJ o productor, sin embargo eso nunca le evito vivir de su profesión tocando en algunos clubs al norte de Alemania o de su trabajo como productor en su propio estudio. Al principio, era un entusiasta del funk y del house lírico, después paso al minimal y al techno.
La música de Robin es ligera y sin mucha complicación, pero no hay que confundir este factor con el hecho de que su estilo y su música son altamente experimentados. Robin ha estado produciendo remixesor muchos años ya y sus primeros éxitos fueron bien recibidos en portales especializados como Beatport. El éxito masivo llego en el verano del 2013 con su remix de la canción “Waves” de Mr. Probz en el verano del 2013, lo que lo convirtió de héroe local a estrella internacional del Deep house. En el 2014 llegó “Prayer in C”. Robin escucho un tema de “Lilly Wood & The Prick” en Youtube y quedó fascinado con la voz, el estilo y el entusiasmo único de Lilly lo que inmediatamente lo empujo a hacer un remix sin pensar mucho en ello. Al siguiente día subió su versión a su canal de Soundcloud y de repente, todo se salió de control. Los fans del Techno y el Deep House de todo el mundo comenzaron a hacer click en la canción hasta conseguir más de 1 millón de escuchas en menos de un mes.
ESCUCHA AQUÍ LA NUEVA CANCIÓN DE ROBIN SCHULZ – “SUN GOES DOWN”